martes, 17 de julio de 2012

Histeria


Histeria
Concepto
Es una afección prolongada (crónica) en la cual una persona tiene síntomas físicos que involucran más de una parte del cuerpo, pero no se puede encontrar ninguna causa física.
El dolor y otros síntomas que las personas con este trastorno sienten son reales y no son creados ni fingidos (hacerse el enfermo).
Causas, incidencia y factores de riesgo
El trastorno generalmente comienza antes de los 30 años y tiende a ser más frecuente en las mujeres que en los hombres. Es más común en personas con síndrome del intestino irritable y dolor crónico.
En el pasado, se pensaba que este trastorno estaba relacionado con el estrés emocional. Al dolor se le restaba importancia por considerarse que estaba "todo en la cabeza".
Sin embargo, los pacientes con histeria clásica parecen experimentar dolor u otros síntomas de una manera que aumenta su nivel de dolor. El dolor y la preocupación crean un ciclo que es difícil de romper.
Las personas que tienen antecedentes de maltrato físico o abuso sexual son más propensas a padecer este trastorno. Sin embargo, no toda persona con una histeria clásica tiene una historia de abuso.
A medida que los investigadores estudian las conexiones entre el cerebro y el cuerpo, hay más evidencia de que el bienestar emocional afecta la forma en la cual las personas perciben el dolor y otros síntomas.
Síntomas
Las personas con este trastorno tienen muchas dolencias físicas que duran años. Con mucha frecuencia, las dolencias implican problemas y dolor crónicos con el aparato digestivo, el sistema nervioso y el aparato reproductor.
Los síntomas a menudo interfieren con el trabajo y las relaciones interpersonales y llevan a muchas consultas con diferentes médicos.
Los síntomas a menudo empeoran con el estrés.
Algunos de los numerosos síntomas que se pueden presentar con la histeria clásica abarcan:
  • Dolor abdominal
  • Amnesia
  • Dolor de espalda
  • Distensión
  • Dolor torácico
  • Diarrea
  • Dificultad para deglutir
  • Mareos
  • Dolores de cabeza
  • Impotencia
  • Dolor articular
  • Náuseas y algunas veces vómitos
  • Dolor durante las relaciones sexuales
  • Micción dolorosa
  • Menstruación dolorosa
  • Dolor en las piernas o en los brazos
  • Palpitaciones
  • Parálisis o debilidad muscular
  • Apatía sexual
  • Dificultad respiratoria
  • Cambios en la visión
Signos y exámenes
Se realizan un examen físico completo y exámenes de diagnóstico para identificar causas físicas. El tipo de exámenes que se hace depende de los síntomas que uno tenga.
Se lleva a cabo una evaluación psicológica para identificar trastornos conexos.
Si, después de tener una evaluación completa, no se encuentra ninguna causa para explicar los síntomas, se puede diagnosticar la histeria clásica.
Tratamiento
El objetivo del tratamiento es ayudarle para que usted aprenda a controlar sus síntomas.
Tener una relación de apoyo con un médico es la parte más importante del tratamiento.
  • Usted debe tener sólo un médico de atención primaria para evitar que le hagan demasiados exámenes y procedimientos.
  • Programe citas médicas regulares para revisar los síntomas y cómo los está manejando. El médico debe explicarle cualquier resultado de los exámenes.
Encontrar un profesional en salud mental con experiencia en el tratamiento de este trastorno con psicoterapia puede servir. La terapia conductual cognitiva (TCC), un tipo de psicoterapia, le puede ayudar a manejar el dolor. Durante la terapia, usted aprenderá:
  • A reconocer lo que parece empeorar el dolor
  • A desarrollar métodos para manejar los síntomas
  • A mantenerse más activo, incluso si todavía tiene dolor
Si usted tiene depresión o un trastorno de ansiedad, puede responder a los medicamentos antidepresivos.
A usted no le deben decir que los síntomas son imaginarios. Muchos médicos ahora reconocen que los síntomas físicos reales pueden resultar del estrés psicológico.
Complicaciones
Usted puede volverse dependiente de analgésicos o sedantes.
Situaciones que requieren asistencia médica
Tener una buena relación con el médico de atención primaria ayuda. Solicite una cita si nota un cambio mayor en sus síntomas.
Prevención
La asesoría u otras intervenciones sicológicas pueden ayudar a personas que son propensas a la somatización a aprender otras maneras de manejar el estrés. Esto puede ayudar a reducir la intensidad de los síntomas.

domingo, 8 de julio de 2012

Cistitis Intersticial


Cistitis intersticial
                                           
Concepto:
Es una inflamación prolongada (crónica) de la pared vesical.
Causas, incidencia y factores de riesgo:
La cistitis intersticial (CI) es una afección dolorosa debida a una inflamación de los tejidos de la pared de la vejiga y cuya causa no se conoce. Se diagnostica generalmente descartando otras enfermedades, tales como enfermedades de transmisión sexual, cáncer de vejiga e infecciones vesicales.
Esta afección con frecuencia se diagnostica en forma errada como infección de las vías urinarias y los pacientes a menudo pasan años sin un diagnóstico correcto. En promedio, hay un retraso de 4 años entre el momento de aparición de los primeros síntomas y el diagnóstico.
La afección se presenta generalmente alrededor de los 30 a 40 años de edad, aunque se ha informado de casos en personas más jóvenes. Las mujeres tienen una probabilidad 10 veces mayor a los hombres de padecer esta enfermedad.
Síntomas:
  • Relación sexual dolorosa
  • Dolor pélvico
  • Molestia urinaria
  • Polaquiuria (hasta 60 veces al día en los casos graves)
  • Tenesmo vesical
Signos y exámenes:
El diagnóstico se realiza descartando otras causas. Los exámenes abarcan:
  • Biopsia de la vejiga
  • Cistoscopia (endoscopia de la vejiga)
  • Análisis de orina
  • Urocultivo
  • Citología de orina
  • Videourodinámica (muestra qué tanta cantidad de orina tiene que estar en la vejiga antes de que la persona sienta la necesidad de orinar)
Tratamiento:
No existe cura ni hay un tratamiento estándar o efectivo de manera permanente para la cistitis intersticial. Los resultados varían de una persona a otra. Mientras se desconozcan las causas de esta afección, los tratamientos se basarán en ensayo y error hasta que se encuentre el alivio.
Elmiron es el único medicamento oral que está aprobado específicamente para el tratamiento de esta afección. Este medicamento recubre la vejiga de la misma manera que Pepto-Bismol recubre el estómago.
Otros medicamentos pueden abarcar:                              
  • Analgésicos opiodes para el dolor intenso
  • Antidepresivos tricíclicos como Elavil (amitriptilina) que pueden aliviar el dolor y la polaquiuria
  • Vistaril (embonato de hidroxizina), un antihistamínico que ocasiona sedación y ayuda a reducir la polaquiuria
Otras terapias pueden abarcar:
  • Hidrodistensión vesical (llenar la vejiga con líquido estando con anestesia general)
  • Entrenamiento vesical (utilizar técnicas de relajación con el fin de entrenar la vejiga para orinar en momentos específicos)
  • Medicamentos instilados: se ponen fármacos directamente en la vejiga. Los medicamentos que se administran de esta manera abarcan: sulfóxido de dimetilo (DMS), heparina, clorpactina, lidocaína, doxorubicina o vacuna del bacilo Calmette-Guerin (BCG)
  • Fisioterapia y biorretroalimentación (puede ayudar a aliviar los espasmos musculares en el piso pélvico)
  • Cirugía que va desde manipulación cistoscópica hasta extirpación de la vejiga (cistectomía)
Modificaciones en la dieta:
Algunos pacientes encuentran que los cambios en la dieta pueden ayudarles a controlar los síntomas. La idea es evitar los alimentos y bebidas que puedan causar irritación en la vejiga. A continuación se presentan algunos de los alimentos que la Asociación para la Cistitis Intersticial (Interstitial Cystitis Association ) considera que pueden causar irritación vesical:
  • Quesos curados
  • Alcohol
  • Edulcorantes artificiales
  • Chocolate
  • Jugos de cítricos
  • Café
  • Jugo de arándanos agrios (Nota: aunque el jugo de arándanos agrios a menudo se recomienda para las infecciones de las vías urinarias, puede hacer que los síntomas de cistitis intersticial empeoren)
  • Habas y judías
  • Carnes curadas, procesadas, ahumadas, enlatadas o que contengan nitrito
  • La mayoría de las frutas a excepción de los arándanos, el melón dulce y las peras
  • Nueces a excepción de las almendras, anacardos y nueces de pino (piñones)
  • Cebollas
  • Pan de centeno
  • Aderezos o aliños que contengan glutamato monosódico
  • Crema ácida
  • Pan hecho de masa fermentada
  • Soya
  • Tofu
  • Tomates
  • Yogur
Los expertos sugieren que no hay que dejar de consumir estos alimentos de una sola vez, si no tratar de eliminar uno cada vez para observar si esto ayuda a aliviar los síntomas.
Expectativas (pronóstico):
Los resultados del tratamiento varían. Algunas personas responden bien a los tratamientos simples y a los cambios en la dieta, mientras que otras pueden requerir tratamientos extensos o cirugía.
Complicaciones:
  • Depresión crónica
  • Dolor crónico que puede ocasionar cambios en el estilo de vida
  • Trauma emocional
  • Costos elevados asociados con las visitas médicas frecuentes
  • Efectos secundarios de los tratamientos (dependiendo del tratamiento).

martes, 3 de julio de 2012

Mioma

Definición
Un mioma es un tumor benigno y no canceroso que crece en el tejido muscular del útero o miometrio en las mujeres.
Sólo un 0,5% de los miomas se convierten en tumores malignos (sarcomas) en las mujeres.Se estima que aproximadamente una de cada cuatro a cinco mujeres de más de 35 años de edad padecen de este tipo de tumor.

Clasificación
Se clasifican generalmente en función de su localización:
submucosos - en el endometrio-, intramurales - en el miometrio- y subserosos - fuera de miometrio, hacia el exterior uterino-.

Origen
La aparición y crecimiento del mioma se ve favorecido por los estrógenos por lo que su presentación se produce en la edad fértil de la mujer; resultando muy infrecuente que lo haga antes de la primera menstruación (menarquia) o después de la menopausia.

Sintomatología
La mayoría de los miomas no presentan síntomas. Por otra parte, a veces incluso pequeños miomas situados en el endometrio pueden causar metrorragias importantes y/o hipermenorreas y así, en ocasiones incluso provocar una anemia.

Diagnóstico
En muchos casos, la exploración bimanual por un ginecólogo permite detectar la presencia de estos tumores, su tamaño y localización. En pacientes obesas, sin embargo, la exploración puede ser confusa - falsos negativos-. o por dolores en los ovarios así como flujo vaginal constante.
La técnica diagnóstica por la imagen más útil - relación información proporcionada/precio- es la ecografía que se puede realizar tanto por vía vaginal como abdominal. Los ecógrafos modernos permiten detectar miomas de hasta 5mm y los sistemas Doppler que incorporan permiten analizar su vascularización. Otras técnicas diagnósticas por la imagen son la tomografía axial computerizada (TAC) y la resonancia nuclear magnética (RNM).

Tratamiento
El tratamiento de los miomas depende de la edad, de que la paciente desee tener hijos o no, del número, tamaño y localización de los miomas y de la sintomatología que se presente.
Como es frecuente que las pacientes con miomas padezcan anemia, dado que se pierde más hierro del habitual por una menstruación normal, es conveniente el consumo de alimentos ricos en hierro y, si fuera necesario tras un análisis de sangre, la toma de suplementos de hierro bajo prescripción médica.
Si la paciente tiene sobrepeso, es importante que pierda peso para que no crezcan los miomas.
Si la paciente desea tener hijos y el mioma puede ser el causante de tu infertilidad, la mejor medida será la MRgFUS (ResoFus) o la quirúrgica. Existen técnicas muy poco agresivas como la histeroscopia y la laparoscopia, que evitan heridas mayores y normalmente son ambulatorias.
Si los miomas son pequeños y están estables, es decir, no crecen y los síntomas no son atenuantes, el mejor tratamiento serán los controles ginecológicos periódicos. Si en éstos se observa que los miomas crecen y/o empiezan a causar dolor, hinchazón abdominal y sangrados excesivos, determinados fármacos como los anticonceptivos, la progesterona y los antinflamatorios que inhiben la síntesis de las prostanglandinas pueden ayudar a controlarlos.
Cuando el útero es muy grande o los miomas crecen muy deprisa, o cuando los síntomas no responden a las medidas farmacológicas, el mejor tratamiento será ya sea las técnicas quirúrgicas o los nuevos procedimientos menos invasivos como es la embolización de arterias uterinas por parte de los radiólogos intervencionistas o el MRgFUS (Magnetic Resonance Guided Focus Ultrasound), el cual en casos seleccionados tiene una alta efectividad con la ausencia de los riesgos de la cirugía.
En ocasiones, la indicación de fármacos antiestrogénicos, como el decapeptil, unos meses antes de la cirugía puede ser útil en mujeres con úteros demasiados grandes o con anemias importantes.